Mi madre mencionó que me veía igual que siempre (gorda) mi hermana dijo que debía buscar otro suéter porque ese era demasiado informal. sin embargo las ignoré y subí a la camioneta. No podía explicarles que no me gusta ningún otro suéter que tengo mas que el flojo y desgastado de siempre, gris como mi porvenir. No podía decirles que todos los demás están demasiado ajustados a mi figura, no me gusta que enmarquen el tremendo tanque te guerra que soy. No podía decirles que cualquier cosa que me pusiera me hacía ver igual o más gorda que la vecina de enfrente a quien mi hermano se la pasa criticando por su forma de comer.
No podía y creo que seguiré así.
Cuando llegamos a la reunión saludé y me enfrasqué en la cocina, sí soy quien usualmente cocino y a la familia le agrada mi sazón. Ninguno ha notado que me causa un asco inmenso y que cuando sirvo mi plato me debato entre comerlo O echarlo al excusado; o comerlo Y echarlo al excusado. Cualquiera de las opciones me hace deprimirme aún más.
Aún con todo eso sobrevivo a la comida, sí, mi plato está vacío pero pretendo que todo cambie cuando el año agarre otro ritmo.
Me alejo de la cocina un rato y converso con mis primas hay algo raro en una de ellas. La veo diferente. Desde pequeña tuvo problemas con la comida pero no se relacionaba en nada con un DA como el mío. Era más bien problemas en su organismo y una bacteria que según lo que su madre, la hermana de mi papá nos dijo ya se había controlado hace unos dos años. Ella es hija del hombre que cada que tiene oportunidad menciona que estoy más gorda y que debería hacer ejercicio o dejar de comer, así, literalmente lo dice, siempre.
Ella está aún más delgada y obsesionada con One Direction mucho más que nunca. Tiene 12 años y lo que descubrí después de un rato me descolocó.
La vi alejarse hacia el patio, oscuro y solo. Sacó su celular y llamó a Jessica su mejor amiga, lo supe por que lo primero que le dijo fue: "Espero que no hayas caído Jessica" Después comenzó a platicar lo que había de comida en casa y cosas vanales. Me acerqué en la oscuridad sin hacer ruido y me escondí en un recoveco de plantas, desde ahí pude escuchar todo.
"No, ya no sabía dónde echar todo, lo guardé en las servilletas pero se remojó y lo eché al piso, a ver si no lo encuentran luego"
Hubo un silencio en el que supongo que su amiga le respondía algo.
"No es que no pude, ayer quise pero no pude, creo que mejor seguiré tirándola porque vomitarla no puedo"
Otro silencio.
"Sí, al fin que ni ganas me dan de probarla"
Más silencio.
"Mi mamá apenas y me vio, todos le preguntaban a Sandra sobre su quinceañera así que no hubo problema para esconderla, pero como era bastante tiempo se remojó el papel, te digo, a ver si no encuentran ahorita toda la porquería esa de comida"
En shock, estaba completamente en shock. Enterarme de que mi prima de doce años está adentrándose en el mismo mundo que yo me ha dejado completamente aturdida.
Tardó un rato hablando en aquel patio y como pude salí sin que se diera cuenta de que la había escuchado.
Ahora pienso que es porque ella se sentía igual que yo.
Cada que la veo me platica sobre su amiga Jessica, sobre el grupo al que ama, sobre lo mucho que odia que sus papás sólo tengan ojos para Sandra y sobre todo me habla acerca de que quiere arreglarse más, quiere verse mejor. Creo que hasta ahora caigo en que son las señales que en algún momento quise mandarle a mi hermana y jamás funcionó.
No sé si quiero contarle sobre mi situación, pero estoy completamente segura de que no quiero que esté tan hundida como yo.
Por lo pronto hasta hoy estoy digiriendo lo que pasó y busco opciones. Siempre he sido del pensamiento de que las wannabes son algo estresante pero hoy más que nunca quiero sacar a mi prima de esto. Es demasiado pequeña para sufrir todo lo que yo sufrí. Es tan sólo mi pequeña prima...
Me despido esperando que pasen un buen año y que sus metas se cumplan. Yo estoy decidida a sacar a mi prima de esto y de lograr llegar a los 60 kg para julio.
Incongruencias, incongruencias por doquier...
